Es sábado, pero no un sábado cualquiera. Tampoco es extraodinario porque sea Sábado Santo, con mayúsculas. Porque aunque no se sea practicante de la religión oficial, la tradición judeo cristiana de este santo pais tiene sus reglas. Si no, veáse como hasta Luis Cernuda sucumbió ante el poder de la noche de la Semana Santa sevillana. Luna de parasceve: Et in Arcadia ego. Una muestra más del peso de nuestra raiz judeocristiana.
Decía que este sábado es singular porque Pepe Amodeo, alter ego de quien está maquinando esta historia, va a publicar su primera entrada en el blog que entre ambos acaban de registrar.
Al modo de Fernando Pessoa y sus heterónimos, tanto Pepe Amodeo como yo sabemos que podemos acabar devorándonos mutuamente: al final no sabremos quién prima sobre quién y quién de los dos pulsará las teclas que hagan entendible esta aventura en formato de diario de navegación.
Hay esperanza en todo náufrago que compone su almadía, y Pepe Amodeo y yo queremos valernos de ella sólo para ver las costas desde otra dimensión, desde otra perspectiva. Esta será nuestra particular manera de ir llegando a las Ítacas, forzosos e indiscutibles destinos de todo lo vivo.
Decía que este sábado es singular porque Pepe Amodeo, alter ego de quien está maquinando esta historia, va a publicar su primera entrada en el blog que entre ambos acaban de registrar.
Al modo de Fernando Pessoa y sus heterónimos, tanto Pepe Amodeo como yo sabemos que podemos acabar devorándonos mutuamente: al final no sabremos quién prima sobre quién y quién de los dos pulsará las teclas que hagan entendible esta aventura en formato de diario de navegación.
Hay esperanza en todo náufrago que compone su almadía, y Pepe Amodeo y yo queremos valernos de ella sólo para ver las costas desde otra dimensión, desde otra perspectiva. Esta será nuestra particular manera de ir llegando a las Ítacas, forzosos e indiscutibles destinos de todo lo vivo.
Hasta la próxima semana.